Ciencia-ficción de alcance social y étnico. En el año 6112 sobreviven en el planeta dos pueblos bien diferentes. De un lado, los herederos de la civilización de progreso, encerrados en el ambiente aséptico de cuatro grandes burbujas, aislados del exterior y de los contratiempos. De otro lado, los cheyenes, habitantes del mundo exterior, mantienen una sociedad tribal, atada a tabúes y amenazada por un mundo hostil. La novela narra el acercamiento fortuito de estas comunidades tan distintas. Ciencia-ficción de alcance social y étnico. En el año 6112 sobreviven en el planeta dos pueblos bien diferentes. De un lado, los herederos de la civilización de progreso, encerrados en el ambiente aséptico de cuatro grandes burbujas, aislados del exterior y de los contratiempos. De otro lado, los cheyenes, habitantes del mundo exterior, mantienen una sociedad tribal, atada a tabúes y amenazada por un mundo hostil. La novela narra el acercamiento fortuito de estas comunidades tan distintas.

Cheyenes 6112

En el año 6112, los hombres no vivían ya diseminados por toda la tierra. Una serie de acontecimientos habían cambiado totalmente la vida de la población del globo. Después de los primeros balbuceos científicos que habían seguido al Renacimiento, se había consolidado, hacia 1850, la “era de la Tecnología”. Siguió inmediatamente la “era del Petróleo”. Despues del año 2000, los grandes indistriales tuvieron que hacer frente a la “Gran Polución”, y asegurar la supervivencia de la Tierra casi durante cuatro siglos. En este clima de pánico, había que proporcionar a los hombres una atmósfera respirable. Los grandes industriales decidieron de una vez por todas aislarlos de los peligros exteriores.