"Olvidar nuestros errores o los malos momentos hace que nos olvidemos también un poco de nosotros mismos". Pero Aurora, la protagonista, una chica de 17 años, no lo sabe. Prefiere no sufrir y olvidar a tener que asumir lo que significa vivir. La solución está a su alcance en el corcel dorado del carrusel de su abuelo, allí se quedan los recuerdos, el dolor. Empieza de nuevo. Hasta ahora lo había hecho pero la llegada al pueblo de Teo y Erin, dos amigos que se fueron, es una interrogante para la protagonista. Siente algo por el chico, la inquieta, ¿pasó algo antes? Tendrá que decidir si recordar y avanzar como persona o no saber. Laia Soler nos sumerge en una historia que no nos dejará indiferentes, una propuesta que atrapa desde el principio hasta el final, muy bien secuenciada, con unos personajes creíbles y construidos con delicadeza que van madurando a lo largo de la narración, y con múltiples detalles y pasajes, distinguidos con letra en cursiva, que nos trasladan del presente al pasado a través de la figura del corcel.
"Olvidar nuestros errores o los malos momentos hace que nos olvidemos también un poco de nosotros mismos". Pero Aurora, la protagonista, una chica de 17 años, no lo sabe. Prefiere no sufrir y olvidar a tener que asumir lo que significa vivir. La solución está a su alcance en el corcel dorado del carrusel de su abuelo, allí se quedan los recuerdos, el dolor. Empieza de nuevo. Hasta ahora lo había hecho pero la llegada al pueblo de Teo y Erin, dos amigos que se fueron, es una interrogante para la protagonista. Siente algo por el... Seguir leyendo
Nosotros después de las doce
Aurora.
Su nombre pesaba como una corona de oro cuando era pequeña. Aurora, como la princesa que durmió cien años por culpa de una rieca y encontró el amor verdadero sin tener que molestarse siquiera en abrir los ojos.
"Nombre de princesa, destino de princesa", le decía su abuelo siempre que la sentaba en el caballo dorado de su carrusel. Y ella le creía, porque cómo no creerle montada en el corcel dorado de un carrusel de cuneto de hadas y compartiendo nombre con la Bella Durmiente.