El mapa de recuerdos de la infancia está compuesto de olores inolvidables, sensaciones únicas que la autora capta en una colección de imágenes, en tonalidades tenues, y troqueles que exigen la interacción constante del lector. El paso de las estaciones, el sabor de las vacaciones, el aroma de los árboles frutales, el tacto de los cuadernos que llevamos a la escuela en un nuevo curso, la emoción de una visita a la librería… Todas esas “pompas de jabón” flotan en la memoria y rozan nuestra piel en determinados momentos. A través de la ingeniería de papel y de los versos, Giuliani emociona y captura añoranzas, mostrando la grandeza de esos pequeños trazos de realidad cotidiana. Al igual que consiguiera en Ver la luz, la enumeración de deseos, aficiones y sugerencias constituye un bellísimo catálogo para cualquier lector con ganas de vivir a fondo cada instante de existencia.

El mapa de recuerdos de la infancia está compuesto de olores inolvidables, sensaciones únicas que la autora capta en una colección de imágenes, en tonalidades tenues, y troqueles que exigen la interacción constante del lector. El paso de las estaciones, el sabor de las vacaciones, el aroma de los árboles frutales, el tacto de los cuadernos que llevamos a la escuela en un nuevo curso, la emoción de una visita a la librería… Todas esas “pompas de jabón” flotan en la memoria y... Seguir leyendo