César y Roma
Italia no es más que un patuco, pero Roma ya pisa fuerte por el mundo.
Cuando nace César (101 a. C.), Roma es una república. Lo es desde la caída de los reyes de Turquínia, en el 509 a. C., y dejará de serlo a la muerte de César. Por supuesto, la península italiana ya tiene esa forma que inevitablemente recuerda una bota de tacón alto dispuesta a «chutar» un balón, que es Sicilia.
[Haz clic sobre las dos primeras imágenes para ver el sumario de la obra.]