La popular escritora y traductora argentina Inés Garland, autora de El jefe de la manada, se alzó con el XXI Premio de Literatura Juvenil "Alandar" que concede Edelvives gracias a esta impactante novela, que recoge los temores y sentimientos de Tadeo, un adolescente que crece en un ambiente asfixiante y opresivo provocado por su propia familia. En un paseo por el río tiene lugar un encuentro fortuito que cambiará su forma de ver el mundo. De la mano de Vera, tiene la oportunidad de conocer otros modelos de familia totalmente divergentes respecto al entorno en el que él ha crecido, un grupo empático que ofrece al protagonista las claves para desactivar esa bomba de relojería emocional provocada, especialmente, por la presión de uno de sus hermanos. La trama está salpicada de afecciones y secretos que generan tensión e incertidumbre, al mismo tiempo que remueve sentimientos a través de la figura de Jano o de la relación que establece con su joven amiga, momentos inolvidables de primer amor en los que muchos lectores/as pueden verse reflejados. A pesar de la crudeza de algunos pasajes, el relato es, en el fondo, un canto a la vida, una tisana curativa que fue publicada, paradójicamente, en plena efervescencia de la pandemia, ofreciendo a los jóvenes lectores -sin querer- más asideros para evitar caer en los días que nacen grises.

La popular escritora y traductora argentina Inés Garland, autora de El jefe de la manada, se alzó con el XXI Premio de Literatura Juvenil "Alandar" que concede Edelvives gracias a esta impactante novela, que recoge los temores y sentimientos de Tadeo, un adolescente que crece en un ambiente asfixiante y opresivo provocado por su propia familia. En un paseo por el río tiene lugar un encuentro fortuito que cambiará su forma de ver el mundo. De... Seguir leyendo