En el silencio de la casa durante el desayuno, pleno invierno, es fácil escuchar el piar del gorrión tras la ventana. Mateo establece un diálogo imposible con el pájaro, ante la atenta mirada del padre, que anima al pequeño a proseguir su conversación. Unos días más tarde, en casa de mamá, el "amigo Pico" vuelve para visitar a su nuevo compañero, con quien sigue estableciendo un vínculo especial. Ambos fraguan una "amistad" que sirve como refugio ante la soledad y los miedos, aunque en el aire flotan aún sentimientos respetuosos que, quien sabe, quizá un día podrían volver a unir a la familia, o no. La realidad es que los diálogos "traducidos" por los padres entre el animal y el protagonista sirven como hilo conductor para mostrar la realidad cotidiana de tantas personas y la convivencia con un menor cuando hay que repartir la vida entre dos hogares. Un bello relato, cargado de simbolismos, en el que que hay rescoldos de amor y una acertada armonía para preservar siempre entre buenos sentimientos tal vez lo más importante, el crecimiento afectivo del pequeño, algo en lo que también contribuirá, sin lugar a dudas, este nuevo amigo volador. Las ilustraciones del artista barcelonés Ignasi Font, teñidas de los colores del estío, refuerzan el mensaje emocional del álbum, escrito por el periodista con veinticinco años de trayectoria y creador de Beeletter, la newsletter sobre medio ambiente, Toni Ulled.

En el silencio de la casa durante el desayuno, pleno invierno, es fácil escuchar el piar del gorrión tras la ventana. Mateo establece un diálogo imposible con el pájaro, ante la atenta mirada del padre, que anima al pequeño a proseguir su conversación. Unos días más tarde, en casa de mamá, el "amigo Pico" vuelve para visitar a su nuevo compañero, con quien sigue estableciendo un vínculo especial. Ambos fraguan una "amistad" que sirve como refugio ante la soledad... Seguir leyendo