Este cuento aborda un asunto que se da en cualquier familia: el hijo o la hija que desea tener un animalito en casa para jugar con él. En ¿Un perro, Bruno? los padres intentan disuadir a su hijo con varios argumentos de carácter práctico, pero Bruno quiere un perro como el de su amigo y no entiende por qué no puede tenerlo, hasta que poco a poco se va dando cuenta que ni él mismo está dispuesto a llevar a cabo los cuidados que requiere. Un libro lleno de razones lógicas que argumentan lo que implica tener un animal en casa. Este cuento aborda un asunto que se da en cualquier familia: el hijo o la hija que desea tener un animalito en casa para jugar con él. En ¿Un perro, Bruno? los padres intentan disuadir a su hijo con varios argumentos de carácter práctico, pero Bruno quiere un perro como el de su amigo y no entiende por qué no puede tenerlo, hasta que poco a poco se va dando cuenta que ni él mismo está dispuesto a llevar a cabo los cuidados que requiere. Un libro lleno de razones lógicas que argumentan lo que implica tener un animal en casa.

¿Un perro, Bruno?

Miguel, el amigo de Bruno, tiene un perro. Un perrito blanco con manchas negras. Miguel lo saca de la cesta, y lo coge en brazos. El perro tiene un pelo suave. Bruno le pasa la mano por todo el cuerpo, desde la cabeza hasta la cola.
–Yo también quiero un perro como el tuyo.
–¿Un perro? –dice la madre de Bruno-. Un perro suelta pelo por todas partes, babea sobre la alfombra y lo tira todo. Además no para de ladrar. No, no quiero un perro.