Estos cuentos se integran dentro de una colección que nace con la noble idea de fomentar la interculturalidad. Ambas historias nos acercan un poco más a la tradición y forma de pensar de otros pueblos. La ingenuidad unida a la desconfianza de los beduinos quedan patentes en el singular relato de Yoha y su particular intercambio. Y esa misma ingenuidad es la que hace que una princesa, a la que le falta la luz de la sonrisa, sea feliz por un segundo ante el increíble espectáculo de unos animales amaestrados por un muchacho. Estos cuentos se integran dentro de una colección que nace con la noble idea de fomentar la interculturalidad. Ambas historias nos acercan un poco más a la tradición y forma de pensar de otros pueblos. La ingenuidad unida a la desconfianza de los beduinos quedan patentes en el singular relato de Yoha y su particular intercambio. Y esa misma ingenuidad es la que hace que una princesa, a la que le falta la luz de la sonrisa, sea feliz por un segundo ante el increíble espectáculo de unos animales amaestrados por un muchacho.

Yoha y el hombre de la ciudad = Joha i l'home de la ciutat. El chico y los animales = El noi i els animals

Un día Yoha regresaba a su jaima montado en su burro.
Llevaba una gran cantidad de leña.
De repente, entre nubes de arena, vio a un hombre montado encima de un artefacto muy ruidoso que se acercaba velozmente hacia él.
Resultó que aquel hombre venía de la ciudad, y Yoha, que era un beduino, desconfió inmediatamente de él.