A través de un narrador omnisciente, algunas secuencias narrativas y varios diálogos, se nos muestra un pequeño reino gobernado por tres ministros y un rey. Los primeros, deseosos de conseguir sus ambiciosos propósitos, no dudan en conspirar contra el monarca. Cuando éste los descubre, les invita a que reflexionen escuchando el trino de los pájaros. Con un lenguaje rico y unas frases cortas y concisas, el autor consigue dar agilidad a un texto casi poético, reforzado por unas ilustraciones que juegan con el color y el tamaño. A través de un narrador omnisciente, algunas secuencias narrativas y varios diálogos, se nos muestra un pequeño reino gobernado por tres ministros y un rey. Los primeros, deseosos de conseguir sus ambiciosos propósitos, no dudan en conspirar contra el monarca. Cuando éste los descubre, les invita a que reflexionen escuchando el trino de los pájaros. Con un lenguaje rico y unas frases cortas y concisas, el autor consigue dar agilidad a un texto casi poético, reforzado por unas ilustraciones que juegan con el color y el tamaño.
Pájaros en la cabeza
El rey era ya muy viejo. Se notaba en que tenía la barba blanca y los ojos tan cansados que no veía un dragón a tres pasos. Pero era un rey bueno, el mejor que había tenido aquel reino en toda su historia.