Gracias a los dibujos que el pequeño Abdulá hace en la arena y a sus reflexiones sobre las historias que le cuenta el abuelo, sabemos que tanto su familia como el resto del poblado han sido expulsados de sus tierras y se ven obligados a vivir en campos de refugiados en el desierto. Allí todo es del color de la arena, como las ilustraciones de este álbum, que, con un predominio de tonalidades ocres, nos envuelven en un desierto cálido pero hostil.
Gracias a los dibujos que el pequeño Abdulá hace en la arena y a sus reflexiones sobre las historias que le cuenta el abuelo, sabemos que tanto su familia como el resto del poblado han sido expulsados de sus tierras y se ven obligados a vivir en campos de refugiados en el desierto. Allí todo es del color de la arena, como las ilustraciones de este álbum, que, con un predominio de tonalidades ocres, nos envuelven en un desierto cálido pero hostil.
El color de la arena
Dice mi abuelo que el mundo es muy grande.
Tan grande que si juntara todos nuestros rebaños mil veces aún quedaría espacio para muchos otros rebaños, mil veces como el nuestro.