En este singular álbum conviven dos historias, una subterránea protagonizada por trabajadoras y diminutas hormigas, y otra, la principal, en la que un gato, una ardilla y un pato se esfuerzan por encontrar un menú que les guste tanto como su adorada sopa de calabaza. Un interesante cuento con el que trabajar con los niños la necesidad de comer de todo y la importancia de atreverse a probar lo desconocido.
En este singular álbum conviven dos historias, una subterránea protagonizada por trabajadoras y diminutas hormigas, y otra, la principal, en la que un gato, una ardilla y un pato se esfuerzan por encontrar un menú que les guste tanto como su adorada sopa de calabaza. Un interesante cuento con el que trabajar con los niños la necesidad de comer de todo y la importancia de atreverse a probar lo desconocido.
¡Deliciosa!
En el fondo del bosque, en la vieja cabaña blanca, hacía rato que tenían que estar cocinando. Ya era hora de almorzar, la hora de comer algo.
Pero en el jardín, se oían susurros y correteos y un poco de follón. Era el ruido que hacían allí fuera un Pato, una Ardilla y un Gato, buscando una calabaza en la calabacera.
No había ninguna que estuviese madura.