Las alas rojas
¿Quién recordaba las alas rojas?
Llegaban de pronto, sin avisar jamás, desde el fondo del cielo que cubría las tierras lejanas.
Se hospedaban durante algún tiempo en los estanques; unos días o unos meses. Después, al igual que habían venido, emprendían el vuelo y desaparecían más allá de la mirada, como los sueños, como la luz...
-¿De dónde vienen? -preguntaba Andreu a su tío.