Bobel, Pina y Mos viven en un triciclo de reparto. Son una familia bohemia y errante para la que el dinero no ocupa un lugar destacado. Todo cambia el día que Bobel decide hacerse rica. Estas opciones de vida poco convencionales por ser consideradas poco estables y beneficiosas, son presentadas como una alternativa tan válida como las demás. La autora hace una crítica al capitalismo destructivo que fomenta el afán por la compra y la riqueza. Las ilustraciones juegan con las tipografías, divierten y además resultan muy explicativas. Bobel, Pina y Mos viven en un triciclo de reparto. Son una familia bohemia y errante para la que el dinero no ocupa un lugar destacado. Todo cambia el día que Bobel decide hacerse rica. Estas opciones de vida poco convencionales por ser consideradas poco estables y beneficiosas, son presentadas como una alternativa tan válida como las demás. La autora hace una crítica al capitalismo destructivo que fomenta el afán por la compra y la riqueza. Las ilustraciones juegan con las tipografías, divierten y además resultan muy explicativas.

Bobel quiere ser rica

Bobel nació en un triciclo de reparto.
Allí vivían su padre y su madre.
Le hicieron un hueco y le pusieron el nombre de Bo-Belle. Eso suena a francés y significa Bonito-Bonita. Le enseñaron a decir mamá y papá y pronunciaban su nombre despacio: Booooooooo-Beeeell...
Después comenzaron a hablar más rápido y decían Bobel.