Ha muerto la señora Huao, la abuela de la familia Fei, dueña del restaurante chino Dragón Rojo. El protagonista se acerca a dar el pésame y descubre una pequeña arqueta de madera lacada que llama su atención. Su amiga Li, la nieta de la fallecida, le explica que dicha arqueta es la almohada de su abuela y que dentro guarda los libros de su vida, un libro por cada década que vivió, forrados en seda de un color cada vez más oscuro según cumplía años. El protagonista busca entonces en su pasado aquellos libros de su propia vida que le acompañarán siempre. Los nueve libros de almohada de la señora Huao son un símbolo de esas lecturas que nos dejan una huella indeleble en cada momento de nuestra vida. Las palabras, escritas en el aire por la transmisión oral o formando parte de una obra escrita nos acompañan en nuestra evolución como personas, nos ofrecen pistas sobre la forma de vivir, nos abren la mente, estimulan nuestra imaginación y, en algunos casos, nos marcan para siempre. Progenitores, amigos, profesores, poetas y narradores son la correa de transmisión de todas esas palabras que, en ocasiones, y por distintas razones, conforman mucho más que una mera obra de entretenimiento.

Ha muerto la señora Huao, la abuela de la familia Fei, dueña del restaurante chino Dragón Rojo. El protagonista se acerca a dar el pésame y descubre una pequeña arqueta de madera lacada que llama su atención. Su amiga Li, la nieta de la fallecida, le explica que dicha arqueta es la almohada de su abuela y que dentro guarda los libros de su vida, un libro por cada década que vivió, forrados en seda de un color cada vez más oscuro según cumplía años. El protagonista busca entonces en su pasado aquellos... Seguir leyendo