Cuatro niños de hace ya mucho tiempo deciden emprender un viaje alrededor del mundo. Para la ida utilizan un bote y para la vuelta, el tren. Sus acompañantes son un gato, que hace de timonel, un anciano kuango-mango y una gran tetera. Durante el camino se encuentran con extraños personajes y descubren países que nunca creyeron que existieran. Un viaje en el que el absurdo es el protagonista y que, además, viene acompañado por una serie de poesías asombrosas y divertidas (diez limericks). La editorial ha rescatado uno de los cuentos del maestro del nonsense para niños, Edward Lear, en una cuidada edición con una breve biografía del autor. Los textos vienen acompañados por las ilustraciones originales del relato, hechas por el propio Lear.
Cuatro niños de hace ya mucho tiempo deciden emprender un viaje alrededor del mundo. Para la ida utilizan un bote y para la vuelta, el tren. Sus acompañantes son un gato, que hace de timonel, un anciano kuango-mango y una gran tetera. Durante el camino se encuentran con extraños personajes y descubren países que nunca creyeron que existieran. Un viaje en el que el absurdo es el protagonista y que, además, viene acompañado por una serie de poesías asombrosas y divertidas (diez limericks). La editorial ha rescatado uno de los cuentos... Seguir leyendo
El cuento de los cuatro niños que dieron la vuelta al mundo (y algunos limericks)

Había una vez, hace ya tiempo, cuatro niños cuyos nombres eran: Violeta, Slingsby, Guido y Lionel, y que deseaban conocer el mundo. Así que compraron un bote para dar la vuelta al mundo navegando por el mar, ya que después volverían por tierra en sentido opuesto. El bote estaba pintado de azul con puntos verdes, la vela era amarilla con rayas rojas, y al partir sólo llevaron un pequeño gato para que timoneara y cuidara del bote.