Bajarse al moro

Habitación destartalada en una calle céntrica del Madrid antiguo. Pósters por las paredes y un colchón en el suelo cubierto de almohadones. Sobre una mesa, revistas pop, como “Víbora”, “Tótem” y otras. En un rincón una señal de tráfico, y en el otro una jardinera municipal. Sobre ella una jaula con un hámster.