Astrid Lindgren recibió en 1958 el premio Hans Christian Andersen tras la publicación de esta obra y en reconocimiento a su trayectoria literaria. En ella recrea aventuras llenas de imaginación y ternura, donde los protagonistas tendrán que poner a prueba su valentía y sentido de la justicia y donde la amistad vence incluso en los momentos difíciles. La ilustración, delicada y expresiva, recoge en los ojos del protagonista todo un mundo de sueños y anhelos infantiles con los que se identificarán tanto niños como adultos.Astrid Lindgren recibió en 1958 el premio Hans Christian Andersen tras la publicación de esta obra y en reconocimiento a su trayectoria literaria. En ella recrea aventuras llenas de imaginación y ternura, donde los protagonistas tendrán que poner a prueba su valentía y sentido de la justicia y donde la amistad vence incluso en los momentos difíciles. La ilustración, delicada y expresiva, recoge en los ojos del protagonista todo un mundo de sueños y anhelos infantiles con los que se identificarán tanto niños como adultos.
Rasmus y el vagabundo
Rasmus estaba en lo alto del tilo, sentado en su rama favorita, pensando en todo lo que no debiera existir en el mundo. ¡Lo primero, las patatas! Aunque hay que reconocer que, bien guisadas y con una buena salsa, no están mal para cenar los domingos. Lo malo es que crecen por todas partes, por lo cual hay que escardar las plantas y cubrirlas con tierra ¡Una auténtica bendición de Dios!