¿Has perdido un diente recientemente? Fíjate bien esta noche. ¿Notas cierto aroma marino entre las sábanas? ¿El salitre ha impregnado la almohada? No lo veas como algo extraño, mucho antes de que el Ratoncito Pérez alcanzara celebridad, ayudó a la señora Ostra en una inolvidable aventura que transcurre, en su mayor parte, en el fondo del mar. Alertado por el cangrejo, mientras el roedor disfrutaba de sus vacaciones en la playa, no duda en seguir la cadena de la solidaridad protagonizada por animales humanizados (a los que el autor confiere simpáticas peculiaridades lingüísticas e identitarias); una implicación que da origen a la tradición que hoy sigue vigente en tantas y tantas casas cuando los niños comienzan a abandonar los “dientes de leche”. Betania Zacarias aporta ilustraciones en tono humorístico en las que predominan tonos pastel, presentadas a sangre durante todo el álbum. Por supuesto entre las guardas se incluye un saquito especial para depositar ese preciado tesoro..
¿Has perdido un diente recientemente? Fíjate bien esta noche. ¿Notas cierto aroma marino entre las sábanas? ¿El salitre ha impregnado la almohada? No lo veas como algo extraño, mucho antes de que el Ratoncito Pérez alcanzara celebridad, ayudó a la señora Ostra en una inolvidable aventura que transcurre, en su mayor parte, en el fondo del mar. Alertado por el cangrejo, mientras el roedor disfrutaba de sus vacaciones en la playa, no duda en seguir la cadena de la solidaridad protagonizada por... Seguir leyendo
La primera aventura del Ratoncito Pérez
Había una vez una señora Ostra que estaba muy muy triste, porque había perdido su única perla.
No paraba de decir con voz de cantante de ópera:
- Estoy muy muy triste, porque he perdido mi única perla.
¡Oh, pero qué triste estoy!