Los calzoncillos asesinos
Antes que nada debo aclarar algo con respecto a mis calzoncillos. Me refiero a que no ha muerto nadie por su culpa. Ahora, que ni te cuento lo que habría pasado si hubiera tenido que llevarlos puestos mucho más tiempo.
La culpa la tiene mi madre. Nada de esto habría ocurrido si ella no fuera tan exagerada con la higiene personal.