Un ingenioso cuento que retrata de forma ingenua los mecanismos de la lógica infantil. Ha llegado la primavera, y la familia Conejo sale al campo a plantar. Sembrarán flores, frutas y hortalizas. Y Flora, la más pequeña, plantará un ladrillo, porque quiere cultivar una casa. Todo crecerá, menos el ladrillo de Flora. Pero ella no perderá la esperanza, y al final del invierno se encontrará con una inesperada sorpresa. Las ilustraciones, expresivas y de colores vivos, están llenas de detalles y de ternura, y retratan una vida familiar ideal y entrañable.
Un ingenioso cuento que retrata de forma ingenua los mecanismos de la lógica infantil. Ha llegado la primavera, y la familia Conejo sale al campo a plantar. Sembrarán flores, frutas y hortalizas. Y Flora, la más pequeña, plantará un ladrillo, porque quiere cultivar una casa. Todo crecerá, menos el ladrillo de Flora. Pero ella no perderá la esperanza, y al final del invierno se encontrará con una inesperada sorpresa. Las ilustraciones, expresivas y de colores vivos, están llenas de detalles y de... Seguir leyendo
¿Seguro que crecerá?
Ya era rimavera y la familia de Flora estaba muy ocupada. Nora plantó un enorme amarilis. Cora, veinte tulipanes rosa.
–¡Ya verás qué bonitas, Flora! –le comentaron sus hermanas.