El temor al agua es uno de las causas más comunes de los miedos infantiles, aunque la presencia del líquido elemento en nuestro entorno tendría que facilitar las cosas. Para ayudar al niño a comprender que lo que le pasa es normal y que no debe sentirse diferente por sentir ese rechazo, Schuumans crea una historia llena de naturalidad, ternura y simpatía. Con ella, en vez de intentar «convencer» al pequeño lector de las virtudes del agua, consigue demostrar que puede convertirse en fuente inagotable de disfrute y felicidad.
El temor al agua es uno de las causas más comunes de los miedos infantiles, aunque la presencia del líquido elemento en nuestro entorno tendría que facilitar las cosas. Para ayudar al niño a comprender que lo que le pasa es normal y que no debe sentirse diferente por sentir ese rechazo, Schuumans crea una historia llena de naturalidad, ternura y simpatía. Con ella, en vez de intentar «convencer» al pequeño lector de las virtudes del agua, consigue demostrar que puede convertirse en fuente inagotable de... Seguir leyendo
Bruno no quiere nadar
–¡Hasta mañana! –dice la señorita–. ¡Y no olvidéis que mañana es vuestra primera clase de natación!
–¡Jo...! Nadar no es divertido –murmura Bruno.
Mamá ya está esperándole en la puerta de la escuela.
–Hola, Bruno, ¿qué te ocurre? Pareces enfadado.
–Mañana tenemos clase de natación.
–¿Ah sí? Qué divertido, ¿no crees? –dice mamá.
–¿Divertido? ¡Nadar no es divertido!
–Eso lo dices porque es la primera vez que vas a nadar. Seguro que mañana lo encuentras muy divertido. ¿No tendrás miedo, verdad? –le pregunta mamá.
–Yo no tengo miedo.