El mundo es redondo como el Sol, como un globo o la rueda de un coche. Las caras de las pirámides son triángulos como una porción de pizza o un quesito. Cada cosa tiene su forma y detrás de cada forma se puede encontrar una historia. Claudia Rueda, a través de esta obra sin palabras y la fuerza narrativa de sus ilustraciones, acerca al mundo de las formas al pequeño lector, sumergiéndolo en un mundo abstracto de círculos, cuadrados, triángulos, trapecios, etc. El mundo es redondo como el Sol, como un globo o la rueda de un coche. Las caras de las pirámides son triángulos como una porción de pizza o un quesito. Cada cosa tiene su forma y detrás de cada forma se puede encontrar una historia. Claudia Rueda, a través de esta obra sin palabras y la fuerza narrativa de sus ilustraciones, acerca al mundo de las formas al pequeño lector, sumergiéndolo en un mundo abstracto de círculos, cuadrados, triángulos, trapecios, etc.