Teresita es una niña bruja que nació en Brujencia, un país de brujos. No es una bruja como los demás pues no tiene aspecto como tal, es preciosa. Sus costumbres y hábitos son más parecidos a los de los humanos. Un día, en la ciudad se armó una buena pues todas las escobas habían desaparecido. No se hablaba de otra cosa. Teresita decide que tiene que resolver esa situación y se aventura ella sola y su aspiradora voladora en la búsqueda. Las aventuras se suceden, conocerá a David, un niño, al que ayuda a escapar de un maltratador y, por fin, encontrará las escobas. Volverá triunfante a su casa con ellas y... ¡alguien más! Un libro reeditado por Algar, que no ha perdido su interés gracias a que el autor creó un mundo fantástico donde no falta el humor y un lenguaje asequible para el lector. Las aventuras de esta brujita continuaron en ¡De cine, Teresita!
Teresita es una niña bruja que nació en Brujencia, un país de brujos. No es una bruja como los demás pues no tiene aspecto como tal, es preciosa. Sus costumbres y hábitos son más parecidos a los de los humanos. Un día, en la ciudad se armó una buena pues todas las escobas habían desaparecido. No se hablaba de otra cosa. Teresita decide que tiene que resolver esa situación y se aventura ella sola y su aspiradora voladora en la búsqueda. Las aventuras se suceden, conocerá a David, un niño, al... Seguir leyendo
La brujita Teresita
El nacimiento
Cualquiera que hubiera pasado aquella mañana de verano cerca de la sección de maternidad del Hopsital General para Brujas El Murciélago Alevoso habría oído unos gritos desesperados capaces de conmover a las mismas piedras:
-¡Ay, señor, señor! esto no puede ser. Tiene que tratarse de un error. ¡Es espantoso! ¡Estaré soñando, seguro!
La persona que así se expresaba era Avelino Limaco, el cual, antes de lamentarse tan desconsoladamente, se había pasado dos horas caminando arriba y abjao por la sala de espera de la sección de maternidad, mientras su mujer, la bruja Estremecida, intentaba que la criatura que había llevado en su vientre duarnet nueve meses viera la luz de este mundo.