Novela de Diego Zúñiga, joven escritor chileno, que narra la historia de un adolescente de familia disfuncional, crecido en los 90, que viaja junto a su padre por el norte de Chile hasta Tacna para ir al dentista. El viaje es fuente de recuerdos de una infancia compleja y solitaria en un Chile oscuro que apenas sale de su reclusión, en la que destaca una extraña relación con la madre, amistades incompletas y siempre turbulentas, abusos y soledad. Si bien la novela no destaca mayormente -aunque los premios y el éxito digan lo contrario- el relato está bien logrado, escrito en una correcta prosa de frase corta, de gran valor emotivo e intenciones poéticas. Los saltos entre los breves capítulos son interesantes y permiten una lectura fluida y atractiva que puede reclutar algunos no lectores, adolescentes y jóvenes. Sin duda una interesante pieza para recorrer el panorama de la narrativa chilena actual, que es a su vez, voz primera de una época que se deja atrás.
Novela de Diego Zúñiga, joven escritor chileno, que narra la historia de un adolescente de familia disfuncional, crecido en los 90, que viaja junto a su padre por el norte de Chile hasta Tacna para ir al dentista. El viaje es fuente de recuerdos de una infancia compleja y solitaria en un Chile oscuro que apenas sale de su reclusión, en la que destaca una extraña relación con la madre, amistades incompletas y siempre turbulentas, abusos y soledad. Si bien la novela no destaca mayormente -aunque los premios y el éxito digan lo contrario- el... Seguir leyendo
Camanchaca
El primer auto que tuvo mi papá fue un Ford Fairlane, del año 1971, que le regaló mi abuelo cuando cumplió los quince años. El segundo fue un Honda Accord, del año 1985, color plomo. El tercero un BMW 850i, azul marino, del año 1990, con el que mató a mi tío neno. El cuarto es una camioneta Ford Ranger, color humo, en la que vamos atravesando el desierto de Atacama