Una obra de teatro incluida dentro de una novela para todas las edades en la que descubriremos que la verdad puede sobre todas las cosas cuando está en juego sentirnos bien con nosotros mismos. Con un lenguaje poético, coloquial y muy cercano a la oralidad, en el que realidad y fantasía se funden de forma magistral, Lygia Bojunga presenta una obra llena de humor, protagonizada por animales humanizados cuyos conflictos se resuelven entre amigos, y a través de las ideas, y en la que hasta lo más insospechado tiene vida.
Una obra de teatro incluida dentro de una novela para todas las edades en la que descubriremos que la verdad puede sobre todas las cosas cuando está en juego sentirnos bien con nosotros mismos. Con un lenguaje poético, coloquial y muy cercano a la oralidad, en el que realidad y fantasía se funden de forma magistral, Lygia Bojunga presenta una obra llena de humor, protagonizada por animales humanizados cuyos conflictos se resuelven entre amigos, y a través de las ideas, y en la que hasta lo más insospechado tiene vida.
Angélica
Le habían dicho:
–¡La vida es maravillosa!
Él todavía era pequeño, no sabía muy bien cómo se vivía y deseaba saber más. Pensó un instante y se atrevió a preguntar:
–¿Cómo se entra en la vida? ¿Acaso hay una puerta a la que llamar? Y si llamas... ¿te abre alguien?
Le respondieron entre risas:
–La vida no tiene puerta. Nacemos en el cielo y después las cigüeñas nos traen a la Tierra.