Lagartija salía por las mañanas a disfrutar del sol y Caracol asomaba por las tardes mientras llovía. Un buen día, cuando Lagartija corría hacia su casa, se cruzó en su camino con Caracol y quedó prendada de él. Lo buscó después bajo las hojas, entre las piedras, junto al río y, cuando felizmente se encontraron, cayeron en la cuenta de que la vida en compañía era imposible. Pero sólo hasta que Caracol tuvo una brillante idea. Un entretenido álbum que nos anima a ser perseverantes para hacer realidad nuestros deseos.
Lagartija salía por las mañanas a disfrutar del sol y Caracol asomaba por las tardes mientras llovía. Un buen día, cuando Lagartija corría hacia su casa, se cruzó en su camino con Caracol y quedó prendada de él. Lo buscó después bajo las hojas, entre las piedras, junto al río y, cuando felizmente se encontraron, cayeron en la cuenta de que la vida en compañía era imposible. Pero sólo hasta que Caracol tuvo una brillante idea. Un entretenido álbum que nos anima a ser perseverantes... Seguir leyendo
¿Dónde estás, Caracol?
En aquella montaña, el sol y la lluvia iban y venían todos los días.
Por las mañanas brillaba el sol y las lagartijas correteaban.
Por las tardes llovía y los caracoles salían a pasear.
Por las noches brillaba la luna y los gallos cantaban.
Una tarde empezó a llover y, mientras corría hacia casa,
Lagartija se cruzó con Caracol, que en ese momento asomaba la cabeza.