¡Increíble Kamo!
-¡Sólo tres respuestas correctas en inglés! -la madre de Kamo tiró el cuaderno de notas sobre el mantel de hule-. ¡Estarás contento!
A veces lo tiraba con tanta violencia que Kamo daba un salto para esquivar el café derramado.
-¡Pero he tenido un sobresaliente en historia! Ella enjugaba el café con un gesto circular y al momento aparecía una segunda taza humeante bajo la nariz de su hijo.
-¡Aunque tuvieras matrícula de honor en historia, no harías que me tragara tu tres en inglés!
Era su tema de discusión favorito. Kamo sabía defenderse.