Freddy. Un hámster en acción
El grito se produjo a las doce del mediodía.
Bueno, no es que pretenda afirmar que eran exactamente las doce, aunque los hámsters dorados tenemos un sentido del tiempo bastante preciso. Yo estaba durmiendo en ese instante. Como se sabe, los hámsters somos roedores nocturnos, según dicen los profesores de Biología, así que el claro mediodía no es precisamente el momento que elegimos para arrancar árboles.