La pequeña Wu-Li
Su madre era una gata siamesa y su padre un gato de azoteas, sin nombre ni dueño.
Ella nació en una caja de cartón, bajo una luna en cuarto menguante. Sin prisas, fue la última en nacer; antes lo hicieron sus tres hermanos.
Al verla, los dueños de la casa decidieron llamarla Wu-li.