El pequeño narizotas
Hace muchos años, en una gran ciudad de Alemania vivían un pobre zapatero y su mujer. El zapatero se pasaba todo el día sentado en su pequeña tienda reparando botas y zapatos, y a veces, si se los encargaban, hacía algunos nuevos. En un pequeño huerto, pasada la puerta de la ciudad, la mujer del zapatero cultivaba fruta y verdura que después vendía en un puesto en el mercado. Sus productos eran tan buenos y estaban tan ricamente colocados que su puesto siempre estaba lleno de clientes.