La base de este relato son el juego sonoro que ofrecen las palabras tratadas como aumentativos y diminutivos y unas ilustraciones de corte humorístico. Ofrece a los lectores una reflexión sobre la importancia de buscar nuestro lugar en el mundo y de estar a gusto con uno mismo, independientemente de nuestro tamaño.La base de este relato son el juego sonoro que ofrecen las palabras tratadas como aumentativos y diminutivos y unas ilustraciones de corte humorístico. Ofrece a los lectores una reflexión sobre la importancia de buscar nuestro lugar en el mundo y de estar a gusto con uno mismo, independientemente de nuestro tamaño.
¡Chichonazo!
Jeremías Chichón era rechoncho, fortachón y de cabeza grande. Un día soleado salió a pasear y se encontró un pequeño sombrero. ¡Un sombrerito! Jeremías Chichón se probó el pequeño sombrero y vio que le quedaba muy bien.