Los amplios conocimientos en propuestas gamificadas del autor gallego, afincado en Madrid, Jacobo Feijóo, han servido como base para el diseño de una colección que cuenta, cada día, con más adeptos. Desde el primer capítulo, las andanzas de la agencia Kronos nos han dado la oportunidad de conocer culturas y personajes emblemáticos -históricos y literarios-; de una forma cercana y divertida (Drácula, Cleopatra, los vikingos, los piratas del Caribe...); y lo más importante, siguiendo el criterio que nosotros, como lectores, tomamos en cada momento. Pero ¿alguna vez os habéis preguntado cuál fue el origen de esta peculiar sociedad secreta? Sabemos que está formada por agentes de todo el mundo que viajan a través del tiempo y el espacio para esclarecer grandes misterios de la humanidad. ¿Cómo desarrollaron esta facultad? Para descubrir el secreto debemos situarnos en un periodo turbulento, la Segunda Guerra Mundial, tiempo en el que un grupo de científicos militares experimentan con un extraño objeto perteneciente al siglo XIX español, durante el periodo de regencia de Isabel II. En aquel entonces, escondida en el sótano de un convento aparece, en el transcurso de una excavación arqueológica, una extraña arca de cedro de la que desaparecen todos los objetos que se introducen. Una comisión, la semilla de la agencia, asume la responsabilidad de investigar la dinámica y las consecuencias que genera este hallazgo... El carismático y colorista proyecto gráfico que acompaña cada encomienda corre a cargo del ilustrador y diseñador Martín Rodríguez.
Los amplios conocimientos en propuestas gamificadas del autor gallego, afincado en Madrid, Jacobo Feijóo, han servido como base para el diseño de una colección que cuenta, cada día, con más adeptos. Desde el primer capítulo, las andanzas de la agencia Kronos nos han dado la oportunidad de conocer culturas y personajes emblemáticos -históricos y literarios-; de una forma cercana y divertida (Drácula, Cleopatra, los vikingos,... Seguir leyendo
Agencia Kronos. El orígen
Una escolta militar armada acompaña a un caballero elegantemente vestido con levita y pañuelo anudado al cuello.
El gentilhombre porta unas diminutas gafas de cristales
redondos y tiene aspecto de académico. Tras ellos, unos pasos
por detrás, un sirviente carga con una pequeña arca de cedro.
Con paso resuelto, se abren camino entre los cortesanos
del Palacio Real, atravesando la larga alfombra central, y finalmente se plantan frente a la reina.
Hacen una reverencia ante Su Majestad y luego se producen unos instantes de tenso silencio.