El dolor que siente el pequeño protagonista de esta historia es difícil de paliar. Su mente está llena de recuerdos, momentos mágicos que se han deshilachado con la ausencia de la abuela. La última vez que estuvo con ella se había convertido en una figura pequeña y frágil, pero con los mismos dones y tesoros para compartir. De repente, las malas noticias han llegado y el zorro solo encuentra consuelo en la escritura de una carta en la que plasma, con cierta impotencia, todos los sentimientos y añoranzas que pasan por su cabeza, mientras la naturaleza abriga su pena. Una emocionante declaración de amor sublimada por las fascinantes ilustraciones de la japonesa Chiaki Okada, quizá una de las más talentosas del panorama artístico actual en el ámbito de la literatura infantil. Sus paisajes orgánicos, teñidos de bruma, el trazo hiperrealista con el que perfila los personajes, la perfecta síntesis del amor entre el nieto y su figura de referencia en actos y miradas... Da igual la edad a la que te acerques al álbum, la indudable belleza de los diseños impacta en todo el que se sumerja en la emotiva historia que contiene, hilada por el galardonado escritor canadiense Jean-François Sénéchal.

El dolor que siente el pequeño protagonista de esta historia es difícil de paliar. Su mente está llena de recuerdos, momentos mágicos que se han deshilachado con la ausencia de la abuela. La última vez que estuvo con ella se había convertido en una figura pequeña y frágil, pero con los mismos dones y tesoros para compartir. De repente, las malas noticias han llegado y el zorro solo encuentra consuelo en la escritura de una carta en la que plasma, con cierta impotencia, todos los sentimientos y... Seguir leyendo